martes, 7 de octubre de 2008

-5-

Noche lunera, voz azabache, baile sin luna.
Pende mi hilo de tristezas y de sombras
ajenas, ajeno a mi vida, color, azul niño.
Beberé, cuando el futuro no sea más que una sombra,
de tu sombra, y de tus sombras.
.. ..
Acércate, alma transparente, acuérdate del recuerdo
del olvido.
.. ..
El hola y el adiós se traban en mi lengua, para decirte
lo que te digo en mi sueño, y nunca
en tus
ojos.
.. ..
Bebo el andar joven de tu paso lejano, princesa inesperada,
y me estremezco.
.. ..
¿Por qué ahora? ¿Y por qué no siempre?
.. ..
Anoche, a las diez de la mañana te memorizé,
y dormí hasta el alba.

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